viernes, 24 de mayo de 2013

Bajo la luz de las farolas...


Siempre le había atraído perderse por las calles de la ciudad mientras los demás dormían... Encontraba algo de placentero en aquella fría brisa que sonrojaba sus mejillas y en seguir la sombra de su propio cuerpo que las farolas dibujaban sobre la acera a su paso.
Por ello, aquella noche, a pesar de la cálida suavidad de su cuerpo rozando el edredón, decidió salir a pasear con su amiga, otorgando a los adoquines el privilegio de ser testigos de sus palabras, palabras llenas de confidencias que únicamente podrían ser hechas bajo la tenue luz de la luna.
Los pasos de cada una trazaban los lados de un perfecto ángulo recto cuyo punto de unión era la esquina dónde se encontraban sus calles, lugar habitual de encuentro para ambas.
No hacía más de cinco meses que escuchara por primera vez su característico acento francés y ya se había convertido en miembro fundamental de su pequeña familia barcelonesa.
Aquella noche le tocaba prestar los oídos a aquella compañera de viaje, hay momentos en los que a uno le toca escuchar. Asumir el rol de espectador resulta más complejo de lo que a simple vista pudiera parecer...
En sus andares nocturnos, se permitían la una a la otra el lujo de “viajarse”, de leerse poco a poco las numerosas páginas que recorrían los relatos de sus vidas...
Aquella noche tocaba trasladarse a los primeros pasos en el París de los 90, cogiendo de vez en cuando algún que otro tren para poder repartir el amor entre un padre y una madre, una huida a Australia para encontrarse a una misma y la nostalgia por quién estaba y se fue...







http://www.youtube.com/watch?v=m9VrA3g4qVw

1 comentario:

  1. Que linda celebración de nuestra amista :)

    Gracias por ser tan sensible, cariñosa y ante todo por ser presente en mi vida.

    Eres una persona excepcional! ; )

    <3

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